Las torres gemelas y el terrorismo
Leopoldo Amondarain
Podemos estar de acuerdo que las Torres Gemelas fue un acto de terrorismo. Pero primero habría que entender lo que se entiende por "terrorismo". Por cierto, concepto muy variado por su diversidad. No cabe duda y no seríamos cristianos si no se nos comprime el corazón y no menos cobardes, ante todo crimen sobre civiles indefensos e inocentes de distintas edades, condiciones sociales y nacionalidades, en su mayoría americanos de la América toda. Madres con niños, viejos achacosos, hombres, obreros y empleados en general, que de nada podían ser inculpados para merecer ese fin trágico. Pero también es cierto, que las víctimas de Hiroshima y Nagasaki, 600.000 en dos "sentadas" tampoco. Y entre 4.000 y 600.000 hay diferencias cuantitativas y humanistas monstruosas. Tampoco los cientos de miles victimados en las modernas y actuales guerras del Golfo Pérsico. ¿O acaso no es terror?, con el fin de quedarse con el petróleo que es árabe o persa sin discusión ni dudas, enterrando vivos pueblos y aldeas bajo las dunas que eran empujadas con topadoras (guerra Tormenta del Desierto de Bush y Powell...). No olvidar a Shabra y Chatila como los dos bombardeos al sur del Líbano, buscando guerrilleros del Hezbollah que aún están por aparecer... El Líbano era un país inerme sin armamentos válidos para su defensa efectiva. Masacraron su población. El genocidio de Palestina e Irak de Saddam Hussein, este puesto y mantenido por más de década y media por la propia USA, tampoco fue terrorismo? Sin sumarle claro está, el hecho que unos "añitos" antes el suministro que la USA hizo de cepas bacteriológicas a su protegido de entonces Saddam Hussein para detener a Irán en la Guerra de los Siete Años. (Arma prohibida por cierto). Eso tampoco fue terrorismo? La Guerra de Dien Bien Pu en Indochina, cuando aviones franceses "Mirage" y de los EEUU arrasaban las aldeas de paja en la selva camboyana con Napalm (fuego líquido...) y ¡filmaban!, a mujeres con sus bebes en brazos envueltos, cual teas humanas, ¡no era terror y crimen de lesa humanidad igual o peor que las Torres Gemelas? Las listas pueden ser interminables para cualquier lado. Ya sea Aznar y España asociados a la Guerra del Golfo, prontos con los bidones de petróleo para llevarse su cuota miserable de la conflagración o ante el despojo a los árabes; o cuando hicieron bombardear Guernica por sus socios nazis en la Guerra Española (pueblo también inerme...) Tampoco fue terror como lo fueron las Torres Gemelas? Ni olvidemos a "La Rubia Albión" con su guerra del Opio contra China, no atacando sino defendiendo la droga que la producían en la India y la comercializaban en Pekín? ¿Qué tal? Como eran rubios sajones de "ojos celestes" no era terror? Sin perjuicio de participar en todas las guerras criminales "organizadas" por los EEUU, sus amados hijos y sumados a la "tierna sociedad que con otros en Wall Street" privilegiadamente manejan las finanzas del mundo y quieren el petróleo para "redondear el poder"... A algunos no se los puede nombrar, porque se "enojan" mucho... Bin Laden murió en su ley, y Dios lo juzgará como se debe. Los demás siguen "toditos" vivos y me gustaría, sería de justicia, se marcasen las diferencias. ¡Me asaltan las dudas al diferenciar entre los "buenos y los terroristas! No se olviden, que algún día escaseará el agua que es a la postre más vital que el petróleo. A nosotros, gracias a Dios nos sobra, acuífero Guaraní mediante. Y puede y va a suceder que mañana, los que hoy prioricen el petróleo necesiten el agua, que es vital. Y nos puede -y también va a pasar como hoy- que los imperios y algunos en particular, descubran que en Caraguatá, detrás de un rancho, un gaucho tiene en formación "cepas" bacteriológicas y nos borren el paisito del mapa. Los poderosos justifican cualquier desmán. Basta con el poder fáctico y la prensa que se compra como todo. El único poder independiente es el de algunas religiones con su poder espiritual fundamentalista, incluyendo la católica que sobrevive y supera los materialismos económicos, logias y poderes fácticos. Para los que somos creyentes algún día, no sé cuándo, se superarán los terrorismos y habrá justicia para todos, pero no la veremos nosotros. Lamentablemente!
